Su pelo es negro mezclado con el blanco de numerosas canas, al igual que su perfecto bigote. Lleva gafas con los cristales algo oscuros, cristales, que debido a su deteriorado estado, se caen, aunque para Malainin, no es problema, rápidamente coge elzam, estira de unos cuantos hilos y rápidamente lo arregla, no le hace falta tener una óptica cerca. Me pareció alucinante ver, la facilidad que tienen para arreglarlo todo.
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gracias Malainin |
La tarde que pasamos juntos, nos presento a su madre, Salka, mujer muy muy anciana que vestía una melfa (velo de las mujeres saharauis) en color azul oscuro y negro. Salka siempre estaba seria, no hablaba casi y nunca te regalaba una sonrisa. Llevaba en sus manos un rosario (o algo así) y constantemente lo estaba tocando y acariciando. Tengo que reconocer que me daba un poco de miedo, ya que, yo le sonreía y ella ni se inmutaba, parecía que estaba cabreada o algo así. Al pasar unos minutos pude comprobar que no era así. Salka (que no hablaba español) se acercó a mí y me regaló un precioso darrah y una bonita pulsera con bolitas marrones y negras. Seguidamente le dijo a Malainin que me lo probara. Así lo hice, me probé el enorme darrah, la pulsera y Malainin se ofreció a ponerme elzam como lo hacían los hombres saharauis. Pasé toda la tarde vestida así, un poco agobiada, por la falta de costumbre, ya que iba andando e iba arrastrando el darrah, elzam se me iba cayendo y me tapaba los ojos... me faltaban manos para poder sujetar todo, vamos...un desastre! Entonces Salka, que me estaba observando, se empezó a reír y me dijo que estaba muy graciosa. Me encantó verla reír, ese fue mi mejor regalo.
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seria pero adorable Salka |
Me parece maravilloso ver como estas personas te regalan lo poco que tienen. Es alucinante, sí la gente saharaui es así.
Sigo con Malainin, que nos llevó a ver muchísimas cosas interesantes en el 27 de Febrero (otro campamento saharaui).
Una mañana, sentados en el coche, de camino al increíble Museo de la Resistencia, vimos decenas de camellos y yo con toda la emoción del mundo, grité: camellos!!! nunca había visto uno!!
Malainin se giro riendo para mirarme y me preguntó: María, ¿quieres verlos de cerca?
Yo le respondí con una enorme sonrisa. Él, sin pensarlo ni un segundo, salió del camino y se dirigió hacia los camellos. Paramos y avisó al pastor para que cogiera uno y lo pudiera tocar. En realidad verlos de tan cerca, da un poquito de respeto, ya que son enormes, enormes, enormes, solo su pierna era igual de alta que yo! Los ojos de los camellos son casi blancos, su pelo es áspero y están llenos de cicatrices. Me encantó poder tener uno tan cerca.
Pasamos el día viendo los camellos, el museo, el hospital..... fue uno de los días que más he aprendido en toda mi vida. Cada cosa que me contaba Malainin me parecía impresionante.
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la felicidad en persona! :) |
Volvimos de noche a casa de Matu, en Auserd.
Y allí estaban todos esperando, con la enorme sonrisa del primer día. Gaici preparando té, Ragía la comida, y los niños miles de cosas que contarte y momentos preciosos que regalarte.
Después de cenar decidimos jugar un rato a las cartas, ya que los pequeños ya se habían dormido. Creo que esta noche fue una de las más divertidas, no podíamos para de reír. Empezamos a jugar Chuso (novio de Irene), Gaici, Abah que tiene 14 años mas o menos, y creo que es la persona mas amable y atenta que he conocido en mi vida y Seitah.
Fue muy muy divertido, entre Chuso y yo les enseñamos a jugar al mentiroso. Por una parte Gaici era exageradamente gracioso, ya que no se enteraba de nada y siempre perdía (le decíamos que era el peor mentiroso del Sahara), por otra parte Seitah hacía millones de trampas y ninguno nos enterábamos, y luego por último Abah confundía los caballos con burros y decía: yo...... mmhhh.... un burro!!!
y todos lo miramos y empezamos a reírnos y decía: no! no! no! que diga.... un...un... un caballo!!! jajaja
Cada vez que lo recuerdo no puedo evitar que se escape una gigante sonrisa...
Echo tanto de menos estos momentos...
precioso dia! :-)
ResponderEliminary lo que nos reímos jugando.... :)
ResponderEliminarMe ha gustado y mucho el relato.
ResponderEliminarYo tambien echo de menos compartir esos momentos con ellos
Gracias